Yo estoy horrible. Estoy muy triste y mi vida no tiene sentido. Me abandonó justo en el momento cuando más lo necesito, Pero está bien, tengo que seguir con mi vida. Todo en mí me daba signos de inestabilidad, de odio supremo hacia mí mismas.

Lo que decían de mí me afectaba absolutamente demasiado y, seamos sinceros, los comentarios de los infantes pueden ser mui destructivos. Era abominable. Bueno, no tanto, pero esa imagen pensaba YO que los DEMÁS tenían de mí. Hasta hace poco creí que mi imagen personal era buena, que mi autoestima era elevada y reposaba en límites correctos o esperados.  En realidad yo no me veía mal, pero sí me sentía mal. Es imposible, si me acordara de todas las humillaciones por las que pasé no tendría que estar viva en este momento. Bueno, como si no hubiera intentado auto-eliminarme. 

Sí, tengo miedo al fracaso. Por eso odio los exámenes y odio que mucha gente lea esto y pueda criticarme. Pero con el tiempo y con los retos de mi vida me di cuenta de que lo que piensa la gente no me interesa, o que al menos puedo fingir que no me interesa y puedo hacer que la gente crea que soy autosuficiente. Lo cierto es que me interesa por demás de la línea de lo normal o esperado. Sí, claro. Siempre excediendo esa línea. Esa soy yo:  la que excede los límites de lo normal. Pocas veces para bien. 

Me había dejado absolutamente sola y claro, yo también me hubiera dejado sola. Pero no volví llorando a casa, estaba más que acostumbrada a la soledad y de hecho la disfrutaba. No se puede extrañar algo que nunca se tuvo

Los escuchaba hablar de sus habilidades y me sentía miserable en menos de dos palabras.. Ver a esa persona, escucharla hablar, seguir cada uno de sus fascinantes gestos, admirar su belleza y más tarde mirarse en el espejo y darse cuenta de que uno es horrible y que estuvo creyéndose bello simplemente porque estaba mirando a alguien lindo que resultó no ser uno. Bueno, si nunca les pasó significa que estoy muy mal de la cabeza. Pero a mí me pasa eso y me olvidaba de verme al espejo, o no quería verme al espejo, o veía otra cosa en el espejo

Y esperé demasiado tiempo. Fingí demasiado tiempo, hasta que exploté.

Todavía me asustan dos cosas más que nada en el mundo. Y esas dos cosas son el abandono y el reemplazo. Los dos por igual. En realidad son casi lo mismo. Toda la vida me sentí reemplazada y lo cierto es que no sé luchar cuando me están desplazando. Cuando llega a mi familia, a mi grupo de amigas o a mi vida una nueva persona opto por retirarme, siento que no puedo ser competencia de nadie. El tema acá sería preguntarse por qué me siento amenazada cuando estoy entre pares, entender por qué tengo esa necesidad de competencia que para mí antes de comenzar ya es desleal.

Me miró y me dijo: “Y pensar que cuando éramos chicos eras linda. Eras hermosa”. Yo me sonrojé y dije bajito “gracias”. Entonces prosiguió: “¿Cómo cambia la gente, no?”. Mi mundo se disolvió. Esperé unos cuantos minutos antes de ponerme a llorar. Esperé estar sola, claro.

Más tarde llegué a pensar que tal cosa llamada amistad realmente no existía. Que era solo un rótulo para cagar a la gente por la espalda y esconder la piedra bajo el grito de “¡¡cómo te voy a hacer eso si somos amigos!!”. Me costó mucho deshacerme de esa idea tan convincente y cierta. Me supuso un esfuerzo enorme hacerme creer que estaba errada, descartar esa idea de mi cabeza. No había amistad. Entonces decidí que a partir de aquel momento no iba a confiar en nadie

La gente no tenía problemas. Los problemas los tenía yo: era antisocial y me creía una mierda entonces tenía que actuar superficialmente, como si nada me afectara.

Era la presa perfecta de un cazador que me ignoraba. Que sabía que existía, pero que decidía ignorarme completamente. Porque si no me hubiera visto, si hubiera desconocido mi existencia quizás habría sido menos doloroso. Pero él decidió ignorarme por completo. Porque peor que hablen mal de uno es que ni siquiera lo miren o noten su presencia

Lo doloroso es que definitivamente así se quede uno: siendo una maldita obsesiva. Supuse que tenía que superarlo pero nada parecía cambiar. De mis inventos, de eso vivía: del timbre que le había atribuido a la voz de él, de la personalidad que le compré, de un futuro ideal juntos, donde no existiera diferencias. En mi cabeza podíamos ser felices y no entendía por qué no se concretaba mi sueño. Me enojé con dios y con el mundo

A veces no puedo conmigo misma por eso todavía me sentía triste. Un sentimiento desgarrador, que me congelaba los intestinos. Sentía ganas de llorar todo el tiempo. Y cuando digo “todo el tiempo” debe entenderse literalmente. No podía ver una película, ni hablar de temas que supiera de antemano me iban a conmover, porque una vez que empezaba a llorar ya no había vuelta atrás. Alguien me había hecho daño, o yo me había hecho daño. Esa moribunda sensación que parecía no terminar.

No quería estar cerca suyo, temía decepcionarlo. Me asombra un poco el tema de tu soledad, que quizás te guste pero por mucho tiempo a nadie le gusta estar solo. Yo siempre fui una chica muy solitaria, aunque no parezca, muy de hacer la mía sin importarme lo que me dijeran los demás; pero cuando crecí me di cuenta de que necesito de alguien. Alguien que me escuche, que me quiera y que en definitiva me ame y me de lo que quiero: una relación estable, seria, sin mayor compromiso que amor duradero.

No te apures a buscar una relación estable. Las cosas se van dando en la medida que nosotros lo permitimos y en el momento que tenga que darse se va a dar. No busques, no fuerces momentos ni decisiones. “Relax”. . Es grandioso cómo a través de los años las personas utilizan las mismas palabras pero para expresar significados completamente opuestos. Años más tarde “relajate” tendría idéntico significado que “no me jodas”.

Lo quería, pero distinto. ¿Por qué distinto? Porque a medida que pasan los años/relaciones uno se pone duro para no sufrir. Entonces querés, pero con resguardos. Y yo le creía, le creía cualquier cosa. Si me hubiera dicho que después de violarme iba a aparecer Papá Noel con una bolsa llena de Barbies para mí, también le hubiera creído.

No esperes de mí una típica relación de novios. O sea: salir todos los viernes, cumplir todos los horarios, cumplir todos los sábados a tal hora, etc, etc. Todo esto por una simple y sencilla razón: ya lo hice y me di cuenta de que no sólo no sirve para nada sino que aburre, cansa, crea rutina. Entonces decidí no volver a hacerlo. Vamos a salir, pero sin ataduras. Entonces yo no te presiono y vos no me presionas, ok? Todos contentos.

No sé qué me pasa, realmente no lo entiendo ¿Qué decís? Nunca pensaste en tirarlo todo a la mierda? Yo varias veces, pero vas a dejar que hagan lo que quieran con vos? Te noto un tanto “reprimida” como que necesitas demostrar cosas que no son reales y que te cuesta expresarte y mostrarte como sos; te mostras como quieren que seas. Si esta es la nueva Lucia, no me gusta definitivamente. Algo muy fuerte pasaba adentro mío: el estúpido sentimiento de desesperación, de abandono.

Qué está pasando? ¿Qué mierda pasa entre nosotros? No quiero parecer pesada, no quiero que pienses que sos todo en mi vida, no quiero que te des cuenta. Pero ¿Cómo hago cuando estoy sola en mi casa y tengo ganas de abrazarte? ¿Qué hago cuando siento que no te intereso nada? ¿Cómo hago? ¿Cómo hago cuando sé que sos todo lo que tengo? Si me quisieras una milésima parte de lo que te amo, sería feliz.

 “Me estoy peleando con vos despacito, casi sin que te des cuenta y cuando abras los ojos ya no voy a estar”. Miedo al abandono. Soy abandonada por todos: amigas, padres, novio, profesores. Todos me abandonan, ¿por qué él no lo haría? Estaba esperando amargamente el día en que no volviera jamás. No soy todo lo que tenés, solo una parte quizás importante, pero reemplazable. No soy única ni irrepetible. Hay muchas lucias dando vueltas. No soporto más todo esto, tu indiferencia; no quiero más esto, no así.

-      -   Estoy cansada de arreglar los problemas superficialmente. No quiero más de esto, no estoi bien.

-      -   Si estás cansada de arreglar “superficialmente” pensá en arreglarte vos antes de intentar hacer algo conmigo.

-       -  No intento nada con vos y conmigo hago lo que quiero. Sé hasta dónde llega mi libertad, no intentes interceptarla.

-       -  Bueno, pensá qué hacés con tu vida, cómo te fue, cómo te va y cómo te va a seguir yendo si seguis así.

- Es lo que más quiero pero no es lo que mejor me hace. Entonces si estoy mal con o sin vos prefiero estar mal sin vos; porque estando con vos el problema es doble: porque seguimos peleando eternamente

Hoy hace mucho frío fuera y dentro de mí. Pienso que tal vez siempre fue así pero estaba ciega, entonces ahora sí puedo darme cuenta porque ciertas cosas me fueron abriendo los ojos de a poco.

Quise escaparme un poco de la realidad pensando que todo iba a cambiar con el tiempo, pero ya ves: Todo sigue igual. Mal.

No me voy por una semana o por dos, me voy de tu vida para siempre porque sé que estoy de más. No me necesitás tanto como yo a vos y muchas veces me dijiste que en las relaciones hay que dar y recibir por igual; no se está cumpliendo esa regla. Siento que siempre sentí más que vos.

A los dos nos gusta que el otro nos diga cuánto nos quiere, pero ninguno de los dos obtuvo nunca lo que quiso. Nunca fue bastante, no nos alcanzó. Tal vez a vos sí te alcanzó, porque no necesitaste nunca verme. Pero no fue suficiente para mí, que te quise con el alma y no podía verte jamás. Tampoco tuviste en cuenta que además de escuchar “te quieros” hay que demostrarlos. Shakespeare dijo alguna vez: “no ama quien no lo demuestra”. Creo que describe perfectamente el “amor” que me tenías.

“Pendeja, no lastimes a quien necesitás, tirá tu orgullo a la mierda alguna vez”. 

Me parece que te hice demasiado caso. Dejé que hicieras lo que quisiste, que vinieras cuando quisieras, que hicieras y deshicieras sin importarte nada de mí. Además, había muchas diferencias entre nosotros. Pero la más notoria era que yo no me quería nada y vos te amabas demasiado. Tanto que en vos no había lugar para mí. Tal vez encuentres a alguien a quien ames tanto como te amas a vos mismo y ese va a ser el amor verdadero. Es un consejo, si yo no lo aguanté, creo que nadie lo va a aguantar, porque yo con esas cosas soy bastante paciente. Es solo un consejo. La pregunta es: ¿por qué no me dijiste desde el principio que te habías tomado nuestra relación de otra manera? ¿Por qué no me advertiste? Te hubiera amado menos, te hubiera dado menos. Ahora estoy atada a vos y es un infierno; por eso decido alejarme ahora. Porque si seguimos con esto que no tiene nombre, voy a amarte cada día mucho más y no es eso lo que quiero.

Lo que más duele es que nunca tuve prioridad en tu vida. Tu felicidad era condición única para que yo estuviera bien. Siempre te tuve arriba, como el religioso tiene a Dios. Pero yo nunca te interesé demasiado, sino hubieses tenido más ganas de verme. Tal vez tantas como yo. Nunca tuve prioridad en tu vida, mientras que vos fuiste todo en la mía. Pero como te amé yo, no te va a amar nadie. 

Todo lo que podía pensar ahora era: “necesito morirme”. ¿Qué hago? ¿A quién le digo? A nadie. No podés confiar en nadie, Luli. Nadie te quiere lo suficiente como para entenderte. Estaba demasiado deprimida como para quedarme estancada. Cuando me aíslo, me alejo y me desdoblo, solo así puedo entender que quizás no es tan importante, no es tan trágico o que tal cuestión no merece mi muerte. Solo cuando me veo desde afuera. Tuve la decisión definitiva de dejar de quererme. Siento un dolor tan hondo, tan profundo como una lanza surcada por entre el estómago. Y me invade una desesperanza que más parece una descarga eléctrica poderosísima que me deja nublada, ciega, somnolienta, imbécil, destartalada. Sin poder de decisión, inactiva e imperante: necesito dormir, o morirme, o que me maten. 

Él es la persona más egoísta y centrada en sí mismo que conozco, que conocí durante todos estos años. No puede parar de hacer maldades, no puede consigo mismo. Necesita, supongo, escarbar en lo más profundo de las personas en busca de un punto débil. Te va a pedir que te relajes, que no lo presiones y por último te va a tirar al basural comunitario para que te coman los buitres. “Me niego. Me rehúso a que me coman los buitres, voy a pelear hasta que se muera”. Mentira, siempre digo algo y hago lo opuesto. Dejé que los buitres me comieran. Ninguno se comparaba con él. Maldito el día en que lo conocí. Eso lo caracterizaba eternamente: su orgullo. Se amaba a sí mismo más que a otros, más que a su perro, a su madre, a mí, a nadie. Se amaba como no había amado a nadie en el mundo. Esa devoción permanente hacia sí mismo hace que no haya lugar en sus prioridades ni en su mente ni en sus ganas para otra persona, ni nombro al corazón porque todavía no estoy segura de que posea uno.

“Te amo pero necesito tiempo”. ¿Qué quiere decir eso? Necesitar tiempo es frenético, es desesperanzado, es casi ridículo. Nadie necesita tiempo. En realidad, no necesitaba tiempo, necesitaba que a tiempo me retirara. Lo culpo de mi soledad, de mi miedo a las personas, de mi desconfianza en general, de mi despecho.

Cuando me despierto, no recuerdo por qué lloré tanto y cuando logro saber porqué, aún no lo entiendo. No puedo ponerme en mis propios zapatos. Como si esa noche de sueños rotos me hubiera borrado todo registro de empatía conmigo misma. Cuando me doy cuenta de que no es suficiente para mí, que necesito más, que no estoy bien.

“Con vos es siempre lo mismo. A un momento estás muriendo y al día siguiente, como lograste taparlo hacés como si nada hubiera ocurrido, olvidando el asunto por completo”. Tenés razón. Siempre ahogo mis sensaciones, mis deseos, mis sentimientos, mis miserias y alegrías. Lo suprimo todo, eternamente, porque a tiempos es menos doloroso dejar de sentir. Cuando dejo de sentir empiezo a pensar. Soy lo que el ambiente quiere que sea, lo que las situaciones me indican que es mejor ser. Que es más conveniente ser. 

¿Todo para todos? 
Siempre hay algún vivo que se apropia de lo que es de todos. 

Ese hombre me ha sido un mentiroso, ya me ves,  triste y cansada.

Lo he visto conquistar mujeres en mi cara

Estoy cansada de ser lo que vos queres que sea, sintiéndome tan desleal, perdida. No se lo que estas esperando de mi, estoy adormecida bajo la presión de ponerme en tu lugar y ser como quisieras que sea. Cada paso que doy es otro error para vos, me volvi tan insensible, no puedo sentir, me canse tanto. Me converti en esto que no quiero ser, lo único que quiero es ser mas como yo y menos como vos. ¿No te das cuenta de que me estas asfixiando? Todo lo que pensaste que yo seria se deshizo justo antes tus ojos. Y se que puedo fracasar también, pero soy asi porque alguien me decepciono.

Se supone que era inteligente, pero el amor te hace debil. Te hace olvidar todo a tu alrededor, entregar el corazón a manos sucias, no correspondidas. Y despues a lamentarlo, llorar, sufrir, olvidar. Te creí para dañarme, te ame sin controlarme. No pense en un final triste, no crei que desaparecerias, no pense que tu amor se iria ni que tu sonrisa se desvanecería. Solo segui para adelante a ser feliz "eternamente", a tu lado para siempre. Tu cambiaste todo eso y me hiciste transformar. Solo soy otra inocente que por el amor, paso a ser una idiota mas.

¿Sabías que te quiero? Te quiero y todo este día te querré. Te querre hasta el final de los tiempos. Tengo mucho que decir, si tan solo me dejaras. 

Yo buscaba que las cosas fueran claras, te aseguro me lograste confundir. Esperaste a que yo me ilusionara para alejarte y dejarme sola aquí. Que sucedió mi amor? Pensé que no mentías, esta dura realidad me hace ver que jamás has sido mio. Que fue lo que te hizo cambiar? Yo te juro hasta creí que me querías. 

Tan enferma de esta ciudad tirándome abajo.

TE SIENTES MEJOR O TE SIENTES IGUAL? ¿TE SERÁ MÁS FÁCIL AHORA QUE PUEDES ECHARLE LA CULPA A ALGUIEN? ¿TE HE DECEPCIONADO? ¿O TE HE DEJADO CON UN MAL SABOR DE BOCA? ACTÚAS COMO SI NUNCA HUBIESES TENIDO AMOR Y QUIERES QUE YO TAMPOCO TENGA. NADA ME DISTE, SOMOS DISTINTOS y NOS HACEMOS DAÑO UNA Y OTRA VEZ. ME PIDES QUE ENTRE PERO DESPUÉS HACES QUE ME ARRASTRE, Y NO PUEDO SEGUIR AFERRÁNDOME A LO QUE TIENES, CUANDO TODO LO QUE TIENES ES DOLOR.

La espera me agotó. No se nada de vos, dejaste tanto en mí. En llamas me acosté y en un lento degradé supe que te perdí. ¿Qué otra cosa puedo hacer? Si no olvido, moriré. Tal vez me lo busqué. Ahora se lo que es perder.

Si me dejas, te prometo no me voy a matar

Adiós adiós ya me fui.
Fuiste mi heroe, mi rey mas divino
Ayer me abandonaste, hoy volves para que?

Es tan difícil todo de nuevo empezar ,sólo te pido nene otra oportunidad. 

Pero que queres que haga? Vos te fuiste, no yo. 

Hace meses que no te veo, que no te sueño, que abandonaste el mundo entre nosotros. Fuiste vos el que lo nuestro acabo, el que puso fin entre nosotros dos. Te llevaste mi corazon en tus manos, te llevaste tu recuerdo de mi mente. A tu sonrisa y a tu rostro, digo adios. Quiero, debo, pero no puedo olvidarte y aun menos recordarte. Ya me duele la cabeza de tanto preguntarme, pues aun no entiendo, porque después de todo te quiero asi?

Cuando hay un poco de felicidad siempre hay alguien que quiere destruirla. Deberías tener cuidado con lo que anda diciendo la gente. Hablar por hablar, juzgar sin conocer, cosa de tontos. El criterio es algo que saben utilizar muy pocos, y {después hablan de respeto}. Hablan de mí por la espalda y a la cara siempre sonrisas falsas. Critican sin escuchar y sin saber, mucho se inventa. No existen comentarios tontos, sino tontos que comentan. 

Era tan cruel cuando hablaba acerca de si misma, siempre se sentía menos, en realidad sentía que no era nada.

Creo que desde esa primera noche debi olvidarte, eramos muy diferentes. Yo real, vos un simple sueño. Algo me decia que eso acabaria mal pero no resisti y entregue mi corazón. Debi quedarme con mi vida, losé. Debi dejarte en ese papel de ilusión y no engañarme diciendome que me querias. No entiendo que es peor, los sueños o la realidad, si sé que en ninguno de ellos tú apareceras.

Creia en tus palabras, recuerdo aun cuando me decias: "Tranquila, yo jamas te voy a dejar." Te crei, como una torpe indefensa que solo vivia enamorada. Asi es, eso es lo que fui una inutil mas en tu mentira que solo se ilusionaba con frasesitas, con abrazos, y con besos. Que creyó un ti aun sabiendo que jamas sentiste lo mismo. Todo esto es mi culpa por engañarme a mi misma diciendome que tu me amabas. Igual no te dejare de buscar.

Tu no tienes la culpa mi amor que el mundo sea tan feo!

Se dice que lo mas triste a lo que una persona puede hacer frente es a lo que pudo haber sido. ¿Pero que hay de la persona que se enfrenta a lo que fue? ¿O a lo que nunca será? Elegir el camino correcto nunca es fácil, es una decisión para la que solo tenemos a nuestro corazón. A veces luchamos contra los pensamientos de nostalgia, nuestros errores, nuestra maldad y la vergüenza que sentimos por no ser las personas que quisiéramos ser. Mirate en el espejo, ¿A quien ves? ¿Es la persona que queres ser?

La luz se ha ido y estoy completamente sola, pero la verdad no me importa en absoluto no contestar mi teléfono. Todos los juegos que jugaste y las promesas que hiciste, no pudiste terminar  lo que empezaste. Estaba ciega no podía ver, apaga las velas, parece que esta será una noche solitaria, pero creo que estare bien. Un dia te despertaras con nada mas que solo un “perdón” y será tarde y tendras de vuelta todo lo que me hiciste.

No sigas a un amor que te hizo sufrir, un amor que un dia se olvido de ti y lo peor, un amor que un dia se fue de ti. No confies en alguien que te hizo promesas falsas y luego, te reemplazo sin ningún dolor. 

¿Conoces la sensación de esperar a alguien que sabes que no aparecerá? Y asi transcurren los días, persistiendo, esperanzada de que me concedas alguna señal de vida, o mejor dicho, de interés. Sentada, esperando recibir un mensaje, un llamado, por lo menos una simple palabra. Soñando que las cosas vuelvan a ser como antes, deseando que mi existencia te importe, aun sabiendo que eso nunca sucederá. ¿Sera que cuando algo se va, se va para siempre? Y cuando reflexiono me siento absurda, patética, ya que es inútil esperar algo que no va a ocurrir. Y aun asi, dándome cuenta de lo ilógico que es todo esto, sigo esperando por vos, por esa oportunidad de un nuevo comienzo que no llega. Quizas sea una ilusa, pero yo sigo creyendo en nosotros.

Intente ser positiva, quererme, luchar y amar a alguien que me pueda dar la felicidad que busco. Probe ser otra persona, cambiar, pero ni siquiera teniendo talle 0 voy a saber llevar mi vida bien. No toda la culpa la tienen los demás, 

yo soy la culpable de mis fracasos, una y otra vez .